Luchar por lo que queremos
- Leyre Laborda Arellano
- 17 may 2018
- 3 Min. de lectura
Conocemos a muchas personas a lo largo de nuestra vida. Muchas de ellas no se quedan y se engloban en un par de cervezas y un hasta siempre. Otras en cambio son personas que hacen mella en nosotros, y marcan un antes y un después. Personas con las que decides emprender una aventura del tipo que sea durante unas semanas, unos meses o a lo largo de toda la vida. Y entre todas estas personas cuantas y cuantas historias se quedan un un “podría haber sido” por miedo a lo desconocido, por miedo a arriesgar. Me parece ridículo como algo que tardamos meses en construir es capaz de desaparecer en cuestión de horas.
En este sentido no se si por romántica, ilusa o estúpida, si hay algo que me hace sentir bien –por muy mal que me lo haya hecho pasar–, voy hacia ello, y lucho. Sé que soy una persona compleja, que pocas veces se me entiende y pocas personas tienen la capacidad de hacerlo. Ya no es que sea una montaña rusa, soy una noria que no sabe ni por dónde le da el aire; tengo momentos y momentos y tengo una bipolaridad que es digna de psicólogo; pero ahora enserio, cuando quiero a alguien, quiero de verdad. Sintiendo hasta que duela.
Y aunque tenga miedo, siempre voy a luchar por lo que quiero porque no me gusta dejar las historias a medias. Y sé que hay historias que nunca terminaran como queramos y otras que terminaran por inercia, sin casi darnos cuenta. Pero de verdad, ¿la gente prefiere quedarse con la duda de qué pasaría si no intentamos nada? Personalmente no quiero que ninguna historia se quede en un quizá y por eso me ha costado nada y menos luchar por lo que tenemos.
Hoy ha sido un día difícil, muy difícil. Pensaba que sólo había una persona en mi vida con la capacidad para hacerme sentir menos que nada, con la capacidad de romperme y al mismo tiempo arreglarme, con la capacidad de generar sentimientos de odio, rabia y cariño al mismo tiempo. Ahora sé que hay dos. Y sonará absurdo, patético o lo que queráis pero para mi lo único que significa esto es que lo que he vivido durante estos meses es algo real y por lo que merece la pena luchar.
No te digo que vaya a ser perfecto ni que sea la historia de nuestra vida. Ni siquiera tengo la capacidad o la seguridad de decirte que va a merecer la pena como las historias de amor de las películas. Lo único que te digo es que te lances, arriésgate porque yo me quiero arriesgar. Que quiero sentir la adrenalina pasando por cada rincón de mi cuerpo. Que sé que tengo muchos pero que muchos defectos porque no soy perfecta, nadie lo es; sólo te digo que ahora mismo tengo mucho mucho miedo, pero tengo claro que quiero perderlo contigo, porque no quiero dejar de sentir. Quiero sentirlo todo y quiero hacerlo contigo.
No puedo asegurarte nada porque no está en mi mano, nadie sabe qué pasará de aquí a un año a dos o a tres, ni siquiera tú, porque nadie puede adivinar el futuro. Sólo quiero pedirte que si aunque sea durante una milésima de segundo se te ha pasado por la cabeza un futuro conmigo, aférrate a eso y no lo dejes ir. No se, no tenemos nada que perder más que la oportunidad de ser felices durante el tiempo que dure, a pesar de lo que duela después.
No quiero perder la ocasión de conocernos, de sentirnos, de querernos bien y de compartir miles de momentos y risas juntos. Lo he dicho, estoy harta del quizás, estoy harta de la maldita frase de “qué hubiera pasado si”.
Y que no sé si vamos a ir a mejor o vamos a ir a peor, si vamos a estrellarnos o vamos a llegar hasta el final juntos, pero sí sé que estoy harta de ignorar mis sentimientos, de esperar a que algo pase, de la falta de comunicación, de poner el freno antes que nada. No quiero seguir así, quiero quitarlo y llegar al paraíso, y si me tengo que estampar, me estampo, pero que no sea porque no lo he intentado y porque no he luchado por lo que quiero.
Así que sólo te pido una cosa, suelta el freno de mano y coge mi mano; que quien arriesga siempre gana porque aunque falle, aprende.
- L.L

コメント